Barcelona.- Agentes de la Policía Nacional han registrado este mediodía diferentes centros de los Bomberos de la Generalitat, entre los que se encuentra la sede central de Bellaterra (Vallès Occidental), la de Sant Boi de Llobregat (Baix Llobregat) y la de Sabadell (Vallès Occidental) y han detenido a dos altos cargos que han sido trasladados a comisaría donde se les ha tomado declaración.
Varios agentes de la Unidad Central de Delincuencia Económica y Fiscal (Udef) se han personado, este mediodía vestidos de paisano y al mismo tiempo, en las instalaciones por orden del titular del Juzgado de Instrucción número 2 de Sagunto.
Tras realizar varios registros han detenido a dos altos cargos del cuerpo de Bomberos y los han trasladado hasta la comisaría para tomarles declaración. Los arrestados son Manel Bosch, jefe de la sala central de Bomberos de la Generalitat, y Ramon Dinares, responsable de la Región Metropolitana Sur.
Fuentes cercanas a la investigación aseguran que tras el interrogatorio, todo apunta, a que los dos altos cargos quedarán en libertad. Los interrogatorios intentan esclarecer presuntas irregularidades en la contratación de medios aéreos utilizados en las campañas forestales.
Fuentes cercanas al caso aseguran que los registros están relacionados con una operación desarrollada en la Comunidad Valenciana, a finales del pasado mes de mayo, a raíz de la cual fue detenido el delegado del Gobierno en Valencia, Serafín Castellano.
Los agentes le acusan de prevaricación, malversación y cohecho después de tener indicios que le vinculaban con la dirección de la empresa Avialsa. Según las mismas fuentes, Castellano recibió regalos a cambio de favorecer a la sociedad aérea en la contratación pública para la extinción de incendios. En la misma operación se detuvo a nueve personas más entre los que se encontraba el propietario de Avialsa, Vicente Huerta.
La investigación se abrió en 2014 después de que el exgerente de Avialsa, Francisco Alandí, denunciara que Huertas había realizado regalos a Castellano durante cacerías a cambio de tratos de favor en la contratación de los servicios de extinción de incendios. La investigación de estas contrataciones ha llevado a la policía hasta las sedes catalanas.
El caso está bajo secreto de sumario y los agentes de la Udef también están realizando registros en diferentes sedes de Bomberos de Madrid y Valencia.
Avialsa ha tenido aviones contratados para tareas de vigilancia y extinción de incendios forestales y para operaciones de salvamento por el Ministerio de Medio Ambiente, la Generalitat de Cataluña, la Generalitat Valenciana, la Xunta de Galicia y el Gobierno de la Rioja, entre otros,para diferentes campañas desde 1995 hasta la actualidad.
Fuente y foto: http://ccaa.elpais.com
