Peligro de caídas a distinto nivel de la cesta de la autoescalera como de los propios vehículos, ausencia de cinturones de seguridad y de otros elementos de retención, botellas sin agarres o la entrada de humo del tubo de escape en la cabina de un camión, carente de reposacabezas. Todas estas irregularidades han sido detectadas por la inspección de riesgos laborales del Ayuntamiento de Palma en seis vehículos de los bomberos. El inspector califica estas deficiencias de «intolerables» y pide su retirada del servicio hasta que no sean subsanadas.
Casi dos meses después de que este informe de prevención de riesgos elaborados fuera emitido, el jefe de Bombers de Palma, Manuel Nieto, y la concejala de Seguridad Ciudadana, Angélica Pastor, firmaron el pasado viernes una instrucción de servicio por la que se retiraban estos vehículos sin cinturón de seguridad. Sin embargo, se da la circunstancia de que otros vehículos con las mismas deficiencias siguen operando en la actualidad.
El inspector de riesgos laborales visitó el pasado 31 de marzo los parques de Son Malferit, Playa de Palma y sa Teulera de Bombers de Palma. Unos días después, el 4 de abril emitió un informe demoledor en el que se recogían toda una serie de deficiencias en los vehículos que no dudó en calificar de «intolerable». Como conclusión, el técnico pedía la retirada del servicio los camiones afectados hasta que no se hubiera subsanado estas carencias.
Así, el especialista apreció en uno de los vehículos de Bombers de Palma que no había sistemas de retención y las botellas de aire no tenían agarre. En otro camión, el técnico se percató de que no contaba con cinturones de seguridad en la cabina de conducción. Algo que ya constituye una infracción de tráfico.
El experto también hizo constar que en otro de los vehículos de bomberos no había cinturones para cuatro de los seis ocupantes. Esta carencia era extensiva para otros camiones de Bombers de Palma.
Muy especialmente significativas han sido las deficiencias apreciadas por el inspector de riesgos laborales del Ayuntamiento de Palma en las autoescaleras. «La cesta de salvamento no cierra correctamente», destaca. En este sentido, el informe también hace constar que dicho vehículo no posee reposacabezas ni sistemas de retención.
«Aunque hay veces que nosotros asumimos ese riesgo, no podemos exponer a un ciudadano al peligro que representa meter a un ciudadano en una cesta que no cierra bien», subrayaron fuentes de Bombers de Palma.
Una prioridad «inmediata»
Tras la preceptiva evaluación del riesgo, el dictamen del técnico fue contundente. «Hasta que la seguridad de los bomberos no quede suficientemente garantizada, no se utilizará este equipo», destacó. Al mismo tiempo calificaba de «inmediata» la prioridad para solventar este problema.
Pese al apremio del técnico de prevención de riesgos, estos vehículos han seguido operando hasta el pasado viernes. Una instrucción de servicio, firmada por el jefe de bomberos, instaba a la retirada de estos vehículos sin cinturón de seguridad.
Paradójicamente, en la solicitud de una reparación inmediata no se ha incluido una autoescalera ubicada en el parque de la Playa de Palma. Esta sigue operando, pese a que tampoco cuenta con cinturones de seguridad.
Además de estos problemas con el material, la plantilla de Bombers de Palma ha experimentado un notorio envejecimiento. Hasta el punto de que el tramo de edad comprendido entre los 50 y los 55 años es el mayoritario en la plantilla. En cinco años, se jubilan 45 bomberos y no han salido plazas a concurso. «Hay que adoptar una solución inmediata, de lo contrario va a ser insostenible», advierten.
fuente: ww.diariodemallorca.es