Con picaduras en diversas partes del cuerpo resultaron tres bomberos que atendieron un exterminio de abejas en iglesia cristiana de Managua Jesús es Salvador, ubicada a 75 metros al sur de los semáforos de La Ceibita, en el sector de Monseñor Lezcano.
La emergencia fue reportada al Benemérito Cuerpo de Bomberos (BCB), ya que en las actividades religiosas estaban suspendidas en esa iglesia por la presencia de abejas africanizadas.
Uno de los bomberos utilizó traje apícola, porque sería el encargado de subir al gigantesco árbol de jenízaro que tiene 15 metros de altura, donde las abejas tenían el panal.
Dichos trajes tienen un costo alto y cuando tienen algún agujero por deterioro, es aprovechado por las abejas, dicen especialistas.
Bomberos estables
“El trabajo que se realizó primero fue atacarlas con diesel, el árbol está hueco, lo que hicimos fue taponear los hoyos donde las abejas podían salir y luego las atacamos con un chorro sólido, y a la vez les echamos detergente para que ellas queden ciegas y se mueran”, detalló el sargento Harold Sandino.
Pese a todas las picaduras que recibieron los bomberos, ninguno ameritó ser remitido a un centro hospitalario.
La picadura de una abeja africanizada puede ser mortal para personas alérgicas, advierten los bomberos.
“Lo importante es que no son alérgicos a las picaduras. Tres salieron con picaduras”, añadió.
Entre los bomberos atacados, se encuentran: el teniente Raúl Ramos, Luis Valladares y otro de apellido Robleto.
¿Qué hacer con panales?
Los bomberos recomiendan que en caso de encontrar panales de abejas en árbol o vivienda, lo primero que deben hacer es llamarlos para que sean exterminadas.
“Les sugerimos que no las toquen. Si los siguen (las abejas), que no las alboroten ni las maten porque ellas tienen un olfato que matando una se les vienen las otras. Tienen que tener mucho cuidado”, recomienda Sandino.
Los bomberos aseguran que las abejas tienen lugares distintos que son preferidos para formar sus panales: cielos rasos, perlines y paredes, árboles de distintos tamaños, chatarreras y sitios donde hay basura y maleza. Además son muy sensibles a los ruidos y a la música.
Diferentes métodos utilizan los bomberos para controlar los panales: con bolsas, agua y detergente. Y el último recurso es el fuego.
Este únicamente cuando las abejas están esparcidas y atentan contra niños y el vecindario.
Fuente: hoy.com.ni