ASUNCIÓN.- Un helicóptero de la Fuerza Área Paraguaya (FAP), al servicio de la Secretaría Nacional Antidrogas (Senad), se precipitó a tierra este jueves en la ciudad fronteriza de Pedro Juan Caballero, departamento de Amambay, zona norte de Paraguay.
La aeronave cayó sobre el depósito de productos de una fábrica de jeringas, por lo que posteriormente se registró un incendio de grandes proporciones que sólo pudo ser controlado tras unas 6 horas de intensa labor de los bomberos voluntarios.
El percance dejó al menos 15 heridos, 12 de ellos tripulantes del helicóptero y otros 3 civiles empleados de la empresa; a más de obligar a la evacuación de unas 12 viviendas de las cuales cinco fueron totalmente derrumbadas, informó la Policía Nacional paraguaya.
De acuerdo al reporte policial, una falla en el motor habría sido la causante para que la aeronave cayera a tierra, aunque desde una baja altura, por lo que los tripulantes pudieron salvarse y resultaron solo con heridas.
Se trata de un helicóptero UH1H, para 12 pasajeros, que iba al tope de su capacidad con cuatro tripulantes y ocho uniformados militares de la Fuerza de Tarea Conjunta (FTC), que se encontraban realizando tareas de rastrillaje en el marco de un operativo contra el narcotráfico.
La aeronave es una de las máquinas que fueron donadas al Paraguay por parte de Taiwán y se utiliza para diferentes misiones que cumple la Fuerza Área, siendo la fabricación de la misma posterior a los años 70.
La Dirección de Comunicación Social de la entidad castrense se pronunció respecto al suceso, señalando que la piloto, Teniente 1° Lilian Mosqueira, realizó los procedimientos adecuados para una emergencia, ya que tuvo una parada total de motor por la pérdida de potencia.
No obstante, aseguraron que la Comisión Investigadora de la Fuerza Área, conformada por oficiales y técnicos, investigará el suceso para dictaminar cuál fue el motivo real de la falla técnica.
Por otro lado, el informe de la Policía da cuenta de que las tareas de combate al fuego fueron llevadas a cabo por dos compañías de bomberos voluntarios de la ciudad de Pedro Juan Caballero, con la colaboración de unidades de bomberos militares de Ponta Porá, Brasil.
Agrega que, si bien el fuego pudo ser controlado luego de varias horas, el depósito de la fábrica fue consumida plenamente por las llamas, debido a que en su interior contaba con elementos altamente combustibles.
Se estima que la pérdida de la instalación fabril sería de unos 60 millones de dólares estadounidenses, precisa el reporte.
Fuente: www.momarandu.com
