Santa Cruz.- La solidaridad se activa casi con la misma velocidad que las llamas. Activistas medioambientales han alzado su voz para alertar sobre la situación que se replica, otro año más, y reclamar la abrogación de las normas que amparan las quemas.
Además de las denuncias, están reactivando las redes de ayuda social tal y como ocurriera el pasado año. Tanto Ríos de Pie como Alas Chiquitanas recurren a las redes sociales para conseguir con urgencia materiales que doten a los voluntarios de las herramientas para combatir los incendios.
La lista inicial contempla equipo personal de protección y material para atacar las llamas como botines, rehidratantes o mochilas de bomberos fijas. «Estamos tratando de reubicar las mochilas que se donaron el pasado año para que las podamos ceder a los bomberos que están en primera fila», explica Jhanisse Vaca Daza, portavoz de Ríos de Pie.
También se ha incluido en la lista otros materiales que permiten asistir a los voluntarios como colirio, barbijos, Dextrotón y energizantes. «Además de los incendios, esta vez estamos preocupados por el Covid-19 y por eso también requerimos pruebas rápidas para aplicarlas a los bomberos», agrega Vaca Daza.
El incesante humo complica dificulta la respiración y podría ser un agravante peligroso para las personas que estén contagiadas de Covid-19. Desde Ríos de Pie recuerdan que el año pasado se lamentó el fallecimiento de 6 bomberos y trabajan para que no haya que lamentar más víctimas.
«Nuestra labor ahora consiste en equipar y dar el apoyo a quienes están en primera fila». Las donaciones se distribuirán, según las necesidades, en aquellos lugares afectados por los incendios, como Concepción, San Matías o San Ignacio. «También estamos apoyando a Sucre y pronto nos organizaremos para llegar a Vallegrande», señala la activista.
Fuente y foto: eldeber.com.bo