Entre Ríos.- Bomberos Voluntarios y agentes de la policía de Entre Ríos debieron trabajar en conjunto, debido a un incendio que consumió una humilde vivienda y a la presunta actitud violenta que adoptó el habitante de la misma.
Según pudo reconstruir un cronista de esta redacción, la fuerza de seguridad provincial fue solicitada debido a que el hombre que finalmente fue detenido, impedía a los bomberos realizar el trabajo necesario para que las llamas no se propaguen a viviendas o terrenos linderos.
Según informaron fuentes policiales, personal policial de Comisaria Segunda fue comisionado a una vivienda ubicada en intersección de calles Lucilo López y 21 del Oeste Sur, a raíz de un incendio que se había generado en una vivienda de la zona.
Al arribar al lugar, los uniformados se encontraron con personal de Bomberos Voluntarios que realizaban su trabajo, en lo que sería una casilla de precarias condiciones. Los bomberos lograron extinguir el foco ígneo y, si bien las pérdidas materiales fueron totales, no se registraron personas lesionadas.
Los agentes también tomaron contacto con el damnificado, una persona de 29 años de edad, quien presentaba un evidente estado etílico. El joven se encontraba alterado y al consultarle sobre lo sucedido, comenzó a agredir físicamente a los funcionarios policiales y a los bomberos, entorpeciendo así su labor ante el incendio.
Fuente: lacalle.com.ar
