Toledo.- Con 5,1 metros de largo, la nueva bomba urbana ligera (BUL) de los bomberos de Toledo no parece gran cosa. Pero va a ser sin duda una herramienta muy valiosa para acceder a espacios del Casco históricos a los que hasta ahora era imposible llegar.
Por ejemplo, hasta el momento ningún vehículo de bomberos podía acercarse hasta el Cristo de la Luz. De haber ocurrido alguna desgracia en la zona, los profesionales hubieran tenido que buscar alternativas. Ese ha sido precisamente el espacio elegido por el Ayuntamiento de Toledo para elegir su nueva bomba urbana ligera, cuyas reducidas dimensiones van a mejorar la atención en calles estrechas.
El vehículo, explicó el concejal de Seguridad Ciudadana, Juan José Pérez del Pino, acompañado de la alcaldesa de la ciudad, Milagros Tolón, está adaptado especialmente para el Casco. Solo Granada contaba hasta el momento con una bomba de estas reducidas dimensiones. Así que los técnicos del parque acudieron allí para conocerlos. Después el Ayuntamiento acudió a Sevilla para ponerse en contacto con la empresa Surtruck, que ha diseñado exclusivamente para Toledo este modelo. La idea es que «acceda a sitios que ofrecen una especial dificultad de la ciudad». Viene a completar la acción de otro vehículo de casi 9 metros de largo, dedicado al Casco y a los accidentes.
La nueva bomba ha costado 190.000. Viene a sumarse al furgón presentado a finales de julio, que en este caso costó 250.000 euros. Se alcanza así una flota de primera salida con 18 vehículos nuevos y una inversión que supera los dos millones de euros.
Se trata de un vehículo «totalmente equipado, nuevo y adaptado a lo que Toledo necesita». Concejal y alcaldesa mostraron su deseo de que nunca se tuviera que utilizar, pero si es necesario, aquí está ya. Con esta incorporación, el Ayuntamiento confiere un avance importante a la eficacia de las intervenciones de este servicio de emergencia en los siniestros que puedan ocurrir en las zonas más angostas de la ciudad, que, además, cuenta con el Casco histórico emblemático.
Características. La bomba de extinción de incendio lleva incluidos los más punteros avances tecnológicos, de seguridad y ergonomía y mejoran la prestación y la eficacia del servicio por parte de los profesionales de emergencias. Cuenta con asientos para soportes de equipos de respiración autónoma homologados, una capacidad de hasta cuatro bomberos, y depósito de agua de 800 litros. Dispone de barandillas anticaídas homologada en techo del vehículo. La potencia del motor es de 150 CV.
Viene dotado con una bomba combinada para extinción de incendios, baja y alta presión con caudales de 1.000 litros por minuto a 10 bar en etapa de baja y 250 litros por minuto a 40 bar en etapa de alta. Existe también un regulador de presión incorporado en bomba que le permite una presión de agua constante independientemente del caudal demandado.
Su carrocería mide 1,85 metros de ancho, lo cual le permite adentrarse en zonas de difícil acceso. Además tiene una longitud total 5,1 metros, y altura de 2,85. Cuenta con un radio de giro de cinco metros.
La compañía constructora dará cursos de formación a los bomberos para su uso.
Fuente y foto: www.latribunadetoledo.es
