El 2 de junio marca un hito importante en el calendario para aquellos que dedican sus vidas al servicio y la protección de la comunidad: el Día del Bombero Voluntario. En esta ocasión, el Cuartel de Bomberos Voluntarios de Sierra de los Padres, celebró este domingo con orgullo y emoción sus años de compromiso inquebrantable con la seguridad pública.
La historia de los bomberos voluntarios se remonta a 1884, cuando Tomás Liberti, un inmigrante genovés, fundó el primer cuartel en La Boca, estableciendo así un legado de valentía y sacrificio que perdura hasta nuestros días. Desde entonces, cada 2 de junio se conmemora esta fecha, recordando la importancia vital de estos héroes cotidianos.
Este domingo, el Cuartel de Bomberos Voluntarios de Sierra de los Padres, ubicado a metros del arco de acceso a Sierra de los Padres, en el cruce de las calles Adolfo y Avenida Argentina, fue escenario de un emotivo acto.
El jefe de bomberos, Sergio Mustafá, lideró la ceremonia, que incluyó la entrega de medallas y ascensos a todo el personal, así como reconocimientos especiales por mérito. El evento culminó con una foto grupal que capturó el espíritu de unidad y camaradería que caracteriza a este cuerpo de voluntarios. Posteriormente, al mediodía, todos los integrantes del cuartel compartieron un almuerzo junto a sus familias, fortaleciendo vínculos y celebrando su dedicación.
En diálogo con LA CAPITAL, Mustafá recordó: “El Cuartel de Bomberos Voluntarios de Sierra de los Padres se fundó en 1977, y desde entonces hemos trabajado incansablemente para proteger a nuestra comunidad”.
Actualmente, la institución cuenta con 76 bomberos en el cuerpo activo, además de cinco en la escuadra auxiliar y otros cinco en la escuadra de reserva. “Somos el primer frente de defensa contra el fuego y otras emergencias en una jurisdicción que abarca el 60% del partido de General Pueyrredon, cubriendo 14 barrios y garantizando la seguridad de nuestros vecinos las 24 horas del día, los 365 días del año”, precisó.
