Córdoba.- Un susto mayúsculo vivieron los Bomberos Voluntarios de San Agustín durante la noche del martes mientras combatían un incendio en la zona de El Durazno, en el Valle de Calamuchita. Un enorme pino se desplomó sobre una de las camionetas del cuerpo de bomberos, dejando el vehículo prácticamente destruido.
La tragedia estuvo a punto de tocar la puerta de los voluntarios, ya que todos se encontraban fuera del vehículo en el momento del incidente, a excepción de una bombera que permanecía en el asiento trasero. Afortunadamente, la mujer resultó ilesa, lo que ha sido considerado un verdadero milagro en medio de una situación tan compleja.
«Fue un momento de mucho susto. El pino cayó con una fuerza impresionante», expresó el cabo Darío Ghizzoni. «Perdimos una herramienta de trabajo fundamental, pero lo más importante es que todos estamos bien. Eso no tiene precio», agregó.
La pérdida de la camioneta representa un duro golpe para los Bomberos Voluntarios de San Agustín, especialmente considerando que se encuentran en plena temporada de incendios y la demanda de recursos es alta. Sin embargo, el espíritu de solidaridad y la determinación de los voluntarios siguen intactos.