Coyhaique-. Después de sufrir un gran siniestro que afectó la que fuera, la Iglesia Parroquial Católica de Coyhaique, los vecinos de calle Condell decidieron formar una nueva Compañía de Bomberos. Primero citaron a los vecinos del sector a una reunión para ver las necesidades y como debían formar la Compañía.
Esta primera reunión se efectúo en casa de Raúl Rifo Céspedes, en esta reunión se encontraban presentes los vecinos Carlos Brito Jorquera, Aurelio Valdivia Ponce, Luis Obregón, José Álvarez, Hernán Matamala, Humberto Cumián, Pedro Durán Valdés, además de la familia Rifo, entre otros. Conversaron bastante cómo debían hacerlo, quedando de acuerdo en formar esta compañía de Bomberos.
Después de algunos días, la reunión se hizo en casa de Aurelio Valdivia “Cuartito Azul”, en un local más amplio donde se podían reunir más personas, llegando un buen número de vecinos que asistieron a esa reunión.
La compañía se formó oficialmente el 17 de noviembre de 1960, y en primera instancia era una brigada ya que tenía que tener la autorización del Cuerpo de Bomberos, para poder funcionar como compañía. La Brigada se llamó “Hacha y Escala”, quedando la directiva conformada por su Director, Carlos Brito Jorquera, Secretario, Peter Peterson Pinto, Tesorero, Aurelio Valdivia Ponce, Pro-Tesorero, Alfredo Zúñiga Zúñiga, Capitán, Hernán Matamala Azócar, Teniente 1º, Washington Báez Barría, Teniente 2º, Humberto Cumián, Teniente 3º, Pedro Durán Valdés y Ayudantes de Compañía, José Álvarez Dinamarca e Hilda Rifo Garcés.
Además se sumaban los voluntarios Juvenal Mansilla Montiel, Amadeo Muñoz Muñoz, Mario Felmer Klenner, José Luis Barrientos Miranda, Ernesto Vargas Gaete, Sergio Romero Mansilla, Luis Obregón Carvallo, Pedro Chávez Chávez y José Flores, más los aspirantes Luis Hernán Rifo Garcés, Fernando Paredes Paredes y Raúl Rifo Garcés.
Se trabajaba haciendo beneficios y el Capitán en ese entonces, Hernán Matamala, gestionó la adquisición de guantes, palas, baldes, y algunas mangueras que dieron de baja la primera y segunda compañía.
La comunidad de Coyhaique ayudó para los premios de sorteos de rifa y ventas de algún artículo para juntar dinero, comprar los implementos necesarios como casacas, cascos, bicheros, y otros utensilios que necesitaba la Brigada. Fue así que el Señor Galindo facilitó un galpón para guardar los implementos, que estaba ubicado en 21 de Mayo a una cuadra de la plaza de armas.
La primera bomba fue un camión Ford el que se adecuó para el traslado de los voluntarios e implementos, era bastante incómodo pero de todas maneras los voluntarios servían con alegría a la comunidad.
Pasados los años llegó a la compañía, que ya lucía su número tres con orgullo, Tercera Compañía de Bomberos de Coyhaique, un Mercedes Benz, la querida “Meche” como le decían a la bomba.
En ese entonces existían muchos vecinos tanto varones como damas que eran socios cooperadores, los que mensualmente aportaban un monto en dinero en efectivo, entre los que se destacan, Rolf Traeger, Ercira Macías, Herminia Morán, Lidia y Enriqueta Bus, Olga Berríos Murillo, Gladys Aliaga, entre otros.
La compañía se formó con mucha fuerza, trabajo y voluntad y como el lema lo decía era “Hacha y Escala”; con baldes se apagaban los grandes y pequeños incendios, ya que no contaban con mangueras, hasta que se pudieron comprar los elementos.
A 55 años de aquel acontecimiento, hoy la Tercera Compañía del Cuerpo de Bomberos de Coyhaique cuenta ya con su nueva casa en calle Las Quintas 779, que permite plasmar los sueños y anhelos de los hombres y mujeres del fuego que por mucho tiempo esperaron este momento luego de que la anterior infraestructura sufriera un incendio que afectó sus instalaciones albergándose en General Parra, donde hoy se encuentra la primera compañía.
Este es un hecho además importante, debido a que ahora los tiempos de respuesta a los llamados se agilizan mucho más, dado que cada compañía cuenta con sus propios espacios en los puntos estratégicos de la ciudad.
fuente: www.eldivisadero.cl
