Buenos Aires.- Dos personas atacaron y destrozaron un cuartel de bomberos de la localidad bonaerense de Bernal, donde los agresores rompieron computadoras, televisores, teléfonos y muebles, luego de recriminar a los servidores públicos por no haber apagado un incendio en una vivienda.
El hecho ocurrió este sábado en el Destacamento Nº 1 de Bomberos ubicado en la calle Tomás Flores y 196, en Bernal Oeste.
«Entraron al destacamento dos hombres mayores de edad en un Fiat Duna rojo. Ellos se supone que andaban en un problema: denunciaron que los vecinos les prendieron fuego la casa», afirmó Oscar Licata, jefe del destacamento.
En el momento en que se produjo el insólito episodio dos bomberos se encontraban de guardia en el destacamento.
«Nos robaron un handy de denuncias y varias cosas más. Lograron abrir el cajón de la mesada donde tenemos los utensilios de cocina y agarraron los cuchillos para amenazar a los muchachos», indicó.
También mencionó que los agresores rompieron la computadora, el CPU donde almacenan toda la información.
«Teléfonos, muebles, televisor, nos arrancaron todos los cables. Los bomberos estamos para brindar un servicio a la comunidad, lo hacemos a pulmón. La sociedad debe replantearse todo», dijo.
En referencia al supuesto pedido de auxilio que los hombres habría realizado al cuartel para que apaguen un incendio, Licata expresó: «Nunca recibimos ningún llamado de esta gente».
«Recién llegó a nosotros cuando estaban destrozando nuestras instalaciones», afirmó.
Además, manifestó: «A esta gente le prendieron fuego la casa y en la vorágine de la pelea con los responsables del incendio, se la agarraron con nosotros».
Precisó que personas que destrozaron el destacamento «vivían en el barrio La Matera, en 812 y 898, de Bernal Oeste, y aparentemente tenían problemas con algunos vecinos que les quemaron la casa».
«Después de que destrozaron el cuartel fuimos con ellos hasta La Matera, pero cuando llegamos ahí comenzó un enfrentamiento entre los dos bandos y los bomberos quedamos en el medio de una lluvia de cascotazos. Una verdadera locura», aseguró.