La campaña “No más tarros” permite contribuir en más de 3.800 negocios que se encuentran afiliados al sistema. “Tener que andar pidiendo dinero en la calle es denigrante para los bomberos”, reconoce Cristián Orellana, superintendente del Cuerpo de Bomberos de Puente Alto y voluntario de la institución desde hace 18 años.
Es una escena frecuente ver voluntarios de Bomberos parados en avenidas o peajes del país, con tarros metálicos colgados al cuello, haciendo colectas para financiar la parte de su presupuesto que el aporte que les hace el Estado no alcanza a financiar. “Los bomberos estamos para las emergencias, para apagar incendios, no para andar pidiendo plata en la calle”, afirma Orellana.
Para eliminar estas colectas, denominadas “tarreos” por los propios bomberos, las compañías de ocho comunas de Santiago iniciaron una campaña llamada “No más tarros”. Con más de 3.800 negocios afiliados y a través de dispositivos electrónicos de red (POS), la iniciativa permite aportar ya sea con tarjeta o con efectivo al hacer una compra.
Según el encargado de la campaña, Roryson Varela, la idea es que a más tardar en enero el sistema funcione en toda la Región Metropolitana para luego expandirse a nivel nacional. Actualmente opera en Puente Alto, San Bernardo, Maipú, Cerrillos, Conchalí, Recoleta, Huechuraba y El Bosque.
Aportes comunales
En este nuevo sistema, los aportes recaudados son entregados a la compañía de Bomberos de la comuna a la cual pertenece el negocio donde se hizo la donación.
Orellana celebra la iniciativa y destaca que genera más cercanía entre la gente y sus bomberos. Agrega que estas donaciones les ayudará a reunir los más de $200 millones que requieren recaudar anualmente en Puente Alto. “
Yo tengo 168 puntos donde a la gente que vaya a comprar le van a preguntar si quieren cooperar a Bomberos y esa plata va directa al cuerpo de la comuna”. Para Varela, la nueva modalidad hace mucho más transparente el sistema de donación. “Con el código que te dan cuando donas, tú puedes ingresar a www.nomastarros.cl y verificar que el aporte se realizó y a dónde fue a parar”.
El locatario se queda con entre el 5% y el 10% de la donación, mientras otra parte va a la empresa Fullcarga, que administra el sistema.
fuente y foto: www.segundinos.cl
