Una reliquia que permaneció por más de un siglo fuera de Iquique recibió el Cuerpo de Bomberos de Iquique, luego que un profesor de una escuela rural de la Novena Región, decidiera donarla a los Chicos buenos locales.
Esta historia comienza cuando un profesor de la Escuela rural de “Cunco” ubicada en la novena región, Carlos Cox toma contacto con la comandancia del Cuerpo de Bomberos de Iquique, manifestando que en su poder mantenía un bajo de los años 1912 que tenía grabado la sigla “Cuerpo General de Bomberos de Iquique” y necesitaba donarla.
La noticia de inmediato despertó el interés del alto mando de la institución. El instrumento en manos del docente, quien también forma parte de la noble institución de Bomberos, perteneciendo a la Séptima Compañía de Temuco, había llegado a manos de un familiar anticuario del profesor, quien se lo traspasó. “él lo entrego para nuestra escuela y después de mantenerla un tiempo donde aprovechamos de enseñarles a los niños la historia de los bomberos”.
El bombero honorario del Iquique y perteneciente a la compañía “Ausonia”, Ítalo Maniello Evangelista, relata que en el Cuerpo de Bomberos de Iquique en sus años de formación existió una banda instrumental, de ahí la procedencia de este instrumento, que ocupará un lugar destacado en las vitrinas del Cuerpo de Bomberos de Iquique.
Los instrumentos en los Cuerpos de Bomberos, no sólo eran utilizadas por las bandas instrumentales, hasta el año 1900 aproximadamente, las compañías tenían un ayudante de órdenes el cual era rentado y recorría las calles citando a los voluntarios por medio de una corneta o clarín, también servía para dar las ordenes, de dar o cortar agua en el incendio o bien ordenes de retirada.
A ésta persona generalmente, se les pagaba, y los vecinos les decían que eran pájaros de mal agüero, porque cada vez que los escuchaban, ocurría incendio en el sector.
El comandante del cuerpo de bomberos de Iquique John Romero Vilches se mostró muy agradecido con el gesto realizado por este establecimiento educacional de “Cunco”, señalando que la llegada del bombardino vino con una serie de cartas y poemas firmadas por niños de octavo básico del establecimiento educacional, todas inspiradas en el insólito hallazgo. “Estos recuerdos los vamos a enmarcar y poner en las paredes de nuestra institución, porque representan algo muy especial para nosotros, una conexión con las personas del sur”, aseguró.
fuente y foto: