En las dos primeras semanas de este mes, los bomberos voluntarios ya tuvieron 19 salidas para sofocar incendios provocados, en su mayoría, por quema de pastizales y minibasurales.
Además, respondieron a pedidos para auxiliar a mascotas en peligro, como un perro que cayó a una alcantarilla y un loro doméstico que subió muy alto a un árbol y sus dueños no podían bajarlo.
Sin embargo, los miembros del cuartel evidencian que la comunidad no apoya su tarea. Y en el gran conglomerado de 90 mil personas, sólo tienen inscriptos 15 socios que aportan entre 20 y 50 pesos mensuales.
Ante esta situación de desinterés y con la urgencia de adquirir más equipamiento y tener dinero para cargar combustible, en esta época de salidas picos por el riesgo de fuego, los bomberos se decidieron a vender pollos a la parrilla todos los sábados y domingos en el acceso al barrio, por avenida 147.
El presidente de la asociación, Raúl Negro, explicó que “trabajamos en una realidad bastante precaria, pero está la capacitación permanente de cada camarada y está la vocación de servicio, con eso se hace mucho; pero igual necesitamos que la gente colabore que nos ayude a crecer porque el cuartel de bomberos es del barrio y para todos los vecinos que lo necesiten”.
El cuerpo activo del cuartel está integrado por 13 bomberos voluntarios, entre ellos una paramédica y rescatistas especializados en siniestros viales.
El destacamento está ubicado en avenida Jauretche, entre calles 174 y 131, lote 67, manzana 92 C, en Terrazas.
Negro comentó que cuentan con tres móviles, la autobomba la donó el Ministerio de Salud, una camioneta donó Defensa Civil y otro rodado lo aportó el Juzgado de Instrucción Nº7. El terreno de una hectárea lo cedió la Provincia, mientras que la Municipalidad y algunos vecinos ayudaron con la construcción y limpieza del predio.
“Tenemos un equipo de bombeo muy moderno y una reserva de 1600 litros, además a las zonas de pastizales y terreno inaccesible ingresamos con mochilas, pero necesitamos una cisterna y que la gente nos apoye, porque nos sentimos muy solos. El número de socios muestra la realidad de cuánto se reconoce esta tarea”, consideró.
La idea de crear la asociación pudo impulsarse cuando quedó desafectada la delegación de Las Dolores en 2011. “La gente no cree en nosotros por la mala gestión de esa asociación, pero no tenemos nada que ver con ellos; ya trabajamos un año y demostramos que somos serios y que tenemos vocación de servicio, somos reconocidos por la Federación de Bomberos de la Provincia y del Consejo Nacional de Bomberos”, aclaró.
Fuente: www.territoriodigital.com