Entre Rios.- El lunes 6 de diciembre de 2004, Andrés Ojeda tenía 17 años y era aspirante a Bombero Voluntario. Pero al realizar una changa, como las que prestaba el cuerpo en aquel tiempo, para obtener algún ingreso falleció electrocutado en una piscina ubicada en una casa particular.
Diez años después en diciembre de 2014, el Superior Tribunal de Justicia condenó a Bomberos a hacerse cargo de la indemnización. Oscar Arce, presidente de Bomberos Voluntarios, reveló que deben afrontar el juicio que cuesta cerca de $ 1.300.000. La institución no tiene fondos y están afrontando el pago con recursos retenidos que tenían en un banco.
Una vez que se acaben y, sino reciben ayuda alguna del Estado, podría llegar a rematar uno o más vehículos del parque automotor para afrontar la deuda.
“Me toca a mí reparar esa situación que es bastante grave, aparte de la muerte de este muchacho, que se lamenta mucho. Pero no ha podido arreglar antes la antigua comisión, no supo hacer bien las cosas para no llegar a esta instancia”, dijo Arce. “Aparentemente falleció porque la bomba estaba en corto”, añadió respecto del accidente en sí.
Los familiares de Ojeda accionaron contra los Bomberos y contra el propietario de la vivienda. “Pero la Justicia dictaminó solamente contra los Bomberos Voluntarios. Eso me llama poderosamente la atención pero bueno. Se apeló al STJ y no entiendo. Esto ya está y ahora me toca a mí y a la nueva comisión afrontar esto”, dijo.
El bombero falleció electrocutado por una bomba de agua, lo cual podría haberse evitado si se hubiese cortado el suministro eléctrico de la vivienda. Según el archivos el Jefe de Bomberos Zapadores, Esteban Bonnet, aseguró en esos días que una de las primeras medidas que se les enseña a los Bomberos a tomar cuando se debe trabajar con aparatos eléctricos es cortar el suministro de energía para evitar cualquier tipo de accidente, algo que no habría ocurrido en este caso.
Al ex jefe de Bomberos Voluntarios, José Goldfarb, le preguntó el miércoles 8 de diciembre de 2004 si la institución tenía seguro. Golfarb respondió afirmativamente pero añadió que: “por más seguros que tengamos, yo creo que la vida no se devuelve”.
Según Arce, los seguros que ahora existen solamente cubren al bombero cuando actúan en situación de emergencia. “La antigua dirigencia había tomado eso como para darle un incentivo a los muchachos, muchos de ellos sin trabajo, era una época de crisis. Se les prestaba herramientas, como una motosierra, para que vayan a cortar árboles”, recordó.
Según el archivo del diario, Goldfarb admitió que muchos de los bomberos “no tienen trabajo y la posibilidad que hay a veces de otorgarles una changa es cuando alguien viene a pedir que le pinten algo o para carpir el fondo de la casa o hacer este tipo de trabajos”, señaló Goldfarb. Una vez ingresado el pedido, en Bomberos se selecciona a algún miembro del personal “para que puedan tener su changuita y que ellos se arreglen en forma particular”.
Arce indicó que, a raíz de ese trágico suceso, se cortaron todos esos servicios. “Por dar una mano se terminó en esta desgracia. Esto lo cortamos, ya no queremos tener otro problema de estos”, dijo. Antiguamente la gente llamaba a Bomberos pidiendo ayuda para “desagotar una pileta, cortar un árbol, sabiendo de la confianza de los muchachos para ingresar en las casas”.
Tareas riesgosas tanto la pileta, por el riesgo de una electrocución, como la poda debido a la posibilidad de que una rama caiga sobre la humanidad de quien realiza la tarea. Desde el cuartel se les prestaban algunos elementos para “darles una mano y que tengan una extra que se puedan ganar”. “A veces le tengo que explicar a los vecinos que no podemos concurrir a ciertos trabajos para no arriesgar y no tener otro problema de estos”, indicó.
Para afrontar el pago, el presidente admitió que están restringiendo todos los gastos. Ya no se hacen servicios extras. “Solamente casos de emergencia”, indicó.
Pero se hace imperioso afrontar otras necesidades como la ropa. “Ya están al límite porque se trabaja mucho y más en verano”, dijo. “Lamentablemente tenemos que decirles que no porque no tenemos el dinero. Lo poco que tenemos lo estamos cuidando para pagar esas cuotas y no dejar sin combustible y cubiertas a las autobombas. Estamos al límite de todo”, indicó Arce.
Por ahora, están pagando cerca de $ 75.000 mensuales a la familia. “Llegamos aun acuerdo porque nos habían embargado las cuentas del banco y cuando asumo la presidencia me encuentro con que las cuentas están embargadas. Con este dinero que había en la cuenta llegamos a un acuerdo con la familia de poder entregarle eso a cuenta y después ir haciendo cuotas de $ 75.000 hasta fin de año”, precisó. Pero aún les resta abonar los honorarios a los peritos, a los abogados de la familia. “Eso sumaría hoy $ 1.300.000”, precisó.
Más adelante, Arce admitió que si se les terminan los fondos y llegan a una situación límite, no les queda otra opción que vender algún autobomba. “Pero eso lo haríamos en una situación extrema en que no recibimos ayuda o nadie nos da una mano”, manifestó.
Pero, al mismo tiempo, dijo que no pueden dejar desprotegida a la ciudad. “Bomberos Voluntarios nació gracias a la comunidad de Concordia. Alguien me preguntaba si íbamos a cerrar el cuartel. Yo le digo que por ahora no, sería lo último que haríamos pero estamos en un momento muy jodido”, manifestó.
Arce señaló que ha pedido ayuda al gobernador de la provincia, Sergio Urribarri, al intendente Gustavo Bordet y al presidente de la Comisión Técnica Mixta de Salto Grande, Juan Carlos Cresto. “Espero que alguien venga y me escuche; se acuerde que Bomberos es una institución muy necesaria. Más en una ciudad como Concordia. Creo que tendrían que darnos una mano por esta vez, por lo menos, para poder salir de esta situación”, señaló.
“Ojalá que alguien escuche. A mi me hubiera sido muy fácil renunciar e irme a mi casa. Yo vivo de mi trabajo y esto lo hago por vocación de servicio. Estoy totalmente ad honorem. Recién vengo al cuartel de trabajar en mi negocio. Lo hago en las horas que puedo, que le dedico porque me gusta la parte bomberil. Hubiese sido más fácil retirarme e irme pero me quedé porque está en juego el cuartel y el respeto por todos los bomberos”, dijo por último el responsable del cuartel.
Fuente: Diariojunio.