El incendio en Chile aún no está contenido. El presidente Gabriel Boric declaró el estado de catástrofe en la región centro y sur del país, donde los focos continúan activos. Ante el pedido de ayuda internacional, el Estado argentino se plegó al auxilio y envío una delegación de bomberos, equipamientos, vehículos y hasta un helicóptero hidrante. En la última semana de enero, brigadistas chilenos colaboraron en las tareas para apaciguar el fuego en la provincia de Rio Negro.
Chile se encuentra en estado de alerta roja por los focos de incendio que se expanden en sus provincias. Según informes del Ministerio del Interior y el Servicio Nacional de Prevención y Respuesta ante Desastres, son ya 22 los muertos como consecuencias del avance del fuego. Además, se registraron al menos 554 heridos y cientas de viviendas perjudicadas en las 45.000 hectáreas arrasadas. Por el momento, hay 251 focos activos en las provincias chilenas, con 80 puntos fuera de control. Se estima que 170 de estos incendios forestales fueron causados por quemas no autorizados.
Según precisó el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible argentino, la asistencia nacional enviada a Chile incluye 64 brigadistas, un helicóptero Boeing CH-47 “Chinook” con capacidad de diez mil litros de agua, 15 camionetas 4×4 con equipamiento forestal y kits de ataque y un camión autobomba forestal 4×4 URO. Además de Argentina, enviaron su apoyo material los gobiernos de Brasil, México y España.