Alejandro Luis Buzó es el nuevo alcanzado por las represalias desatadas en el seno del CBVP. Buzó forma parte del grupo de bomberos que, con documentos en mano, denuncia desde hace casi un año las irregularidades que habrían sido cometidas por los miembros del Directorio del Cuerpo de Bomberos.
En respuesta a sus denuncias, y mientras los directivos del CBVP son investigados por la Fiscalía, Buzó fue dado de baja por el Tribunal de Justicia de la institución. Emblemáticamente, relató Alejandro a la redacción de RDN, su baja fue anunciada el 2 de junio, fecha en la que se recuerda el día del bombero.
Sumario irregular
De acuerdo al documento del Tribunal de Justicia del CBVP, Alejandro Buzó fue dado de baja en virtud al artículo 358 del reglamento general de la institución. Ese artículo tiene varios incisos, pero la decisión se sustenta en uno en particular que habla de inasistencia injustificada por más de 365 días a prácticas, guardias y otras actividades.
El sumario contra Buzó y varias personas más había sido abierto ya entre febrero y marzo pasado. Según el mismo, el procedimiento fue totalmente irregular pues dentro de un mismo sumario fueron incluidas personas que no habían cometido las mismas faltas. Sin embargo, bajo la figura de ausencias los incluyeron a todos dentro de la misma bolsa.
Alejandro se enteró del sumario cuando le llegó una citación a declarar apenas horas antes de la audiencia que le habían fijado. Ante esta situación, remitió una nota solicitando conocer la falta por la cual era sumario. La nota fue remitida el 4 de abril pasado y el Tribunal nunca respondió sino hasta ahora, cuando simplemente decidieron darle de baja, sin siquiera permitirle ejercer su derecho a la defensa.
Más llamativo aún es el hecho de que Buzó seguía asistiendo a su compañía de origen, la tercera compañía de Sajonia, lo que contradice totalmente lo alegado para darlo de baja.
El sumario por el cual ahora Buzó es dado de baja fue abierto por un período pasado (2014-2016). Es decir, cuando el directorio del CBVP era otro -en teoría-. “¿Cómo pueden abrirme un sumario por un periodo ya pasado, en donde ni mi Cuartel de Sajonia, ni ese Directorio encontraron ningún hecho que amerite mi sanción?”, cuestionó Alejandro.
Quienes formaban parte del directorio y están perpetuados en el cargo, coincidentemente, descubrieron las supuestas faltas de Buzó recién después de que el mismo “osara” denunciar las groseras irregularidades en el manejo de fondos.
Crónica de una baja anunciada
El propio Rafael Valdez, titular del CBVP hoy imputado por las irregularidades detectadas en el seno de la institución, anunciaba públicamente desde hace meses que Buzó sería dado de baja. Curiosamente, esos anuncios comenzaron después de que se iniciaran los cuestionamientos hacia el directorio por el supuesto manejo desprolijo de fondos por parte del Directorio.
“Obviamente, el haberles dado tan duro y de manera pública anticipaba esto”, refirió Buzó a RDN.
Los cuestionamientos por parte de Buzó contra Valdez se iniciaron ya en la época en la que éste último se desempeñaba como ministro de la Secretaría de Emergencia Nacional (SEN), cuando incluso el Congreso llegó a solicitar informes sobre la utilización de recursos de esa entidad pública.
Por ejemplo, se detectó que Valdez -entonces titular de la SEN y ligado al CBVP- asignó a los bomberos una donación de US$ 200.000 que había realizado el gobierno de Taiwán al Estado paraguayo. Autoasignaciones de este tipo, se descubriría luego con investigaciones periodísticas y de la Fiscalía, eran una cuestión habitual en filas de los bomberos.
Persecución a denunciantes
Alejandro Buzó no es el único denunciante de las irregularidades que fue expulsado del CBVP desde que el escándalo se destapó. Ya varios habían sido dados de baja de forma alevosa hace un par de meses dentro de una misma nómina.
Cuando surgieron cuestionamientos y denuncias de persecución, las expulsiones comenzaron a ser disimuladas, al ser incluidas dentro de sumarios masivos por motivos variados.
fuente y foto: www.rdn.com.py