Dos aspirantes a bombero en la oposición que lleva a cabo el Ayuntamiento de Murcia han sido excluidos del proceso de selección por dar positivo en un control antidopaje realizado tras una de las pruebas físicas, según consta en una resolución que se ha publicado en la página web municipal (www.murcia.es).
Los dos excluidos, que todavía tienen derecho a que se les someta a un contra-análisis para que se confirme el positivo, habrían tomado sustancias prohibidas en la prueba de resistencia de 1.500 metros, una de las más duras del proceso.
No obstante, el control antidopaje solo se realizó a seis de los 180 aspirantes que quedan en el proceso selectivo, elegidos al azar, por lo que algunos opositores sospechan que pueden ser muchos más los que hayan consumido sustancias prohibidas para potenciar su rendimiento en las pruebas físicas del proceso.
La resolución del Ayuntamiento de Murcia no dice qué sustancia habían tomado los dos opositores que han dado positivo. Las bases del proceso selectivo establecían que «la lista de sustancias y métodos prohibidos que se usará de referencia» para estos controles antidopaje «será la publicada por la Agencia Mundial Antidopaje».
«En cualquier momento del desarrollo de las pruebas físicas, el tribunal podrá convocar a aquellos aspirantes que considere para la realización de un control de dopaje mediante la recogida de una muestra de orina no inferior a 100 mililitros», señalaban también las bases de la oposición municipal, la primera convocada desde que José Ballesta es alcalde de Murcia.
La convocatoria se realiza para cubrir 30 plazas del Servicio de Extinción de Incendios y Salvamento. El proceso selectivo consta de distintas fases. En primer lugar, un cuestionario de 100 preguntas tipo test y de cinco pruebas de aptitud física (prueba combinada; de velocidad 100 metros; de resistencia de 1.500 metros, de natación de 50 metros y de inmersión de 25 metros).
También tendrán que superar unas pruebas de aptitud físico-profesional en las que se acredite la tolerancia al vértigo y a la claustrofobia y la capacidad de velocidad, resistencia y agilidad con transporte de implementos.
Por último, un equipo psicológico realizará las pruebas de aptitud psicotécnica con el fin de determinar la personalidad y aptitudes del aspirante para el desempeño del puesto de bombero, y una entrevista personal para verificar que reúne las condiciones necesarias para el normal desempeño del puesto de trabajo.
fuente: ww.laopiniondemurcia.es
