Un informe de la Junta Nacional de Bomberos, concluyó que el pasado 10 de marzo al interior de la Segunda Compañía de Bomberos de Penco, hubo una fiesta en que se consumió droga, alcohol, hubo peleas y un presunto abuso sexual contra una oficial.
El informe de gestión realizado a través del Consejo Regional de la institución en el Biobío, detalla que los hechos «transgreden toda norma de urbanidad, buen comportamiento y buenas costumbres que se deben mantener en dependencias de una institución bomberil; se ha faltado a la ética y a los valores básicos y fundacionales que nos rigen, causando desprestigio institucional ante sus camaradas bomberos y la opinión pública».
El superintendente de Bomberos de Penco, Marco Parada, explicó que la denuncia de abuso sexual está en manos de la justicia y que al interior de Bomberos, un Consejo Superior de Disciplina que está revisando las transgresiones de la autorización para la realización de la fiesta.
El superintendente Parada indicó que «efectivamente (los voluntarios) sí fumaron marihuana dentro de la institución y ellos están siendo pasados a consejo. Ahí hay sanciones de algunos voluntarios por 10 y seis meses fuera de la institución».
El informe final de la investigación detalla que la responsabilidad es de los oficiales a cargo por no supervisar que todo se realizara en orden, por lo que en el primer punto de recomendaciones, exige la intervención inmediata del cuerpo de Bomberos de Penco, decisión que por ley debe tomar el gobernador provincial.
Más problemas
Sin embargo no solo ese episodio es el detonante de los problemas, debido a que se arrastra otra investigación concluída, en que se establecen fallas en el sistema de control financiero del Cuerpo de Bomberos de Penco. Se emitieron cinco boletas ideológicamente falsas en 2017.
A eso se suman los problemas de rendición de caja a entidades superiores. El superintendente Parada, detalla que él interpuso dos querellas criminales, una «por apropiación indebida contra un ex oficial de Bomberos, Óscar Fonseca Grandón». Como director de la Primera Compañía de Bomberos de Penco, no pudo justificar gastos por al rededor de cinco millones de pesos.
La otra querella es por estafa contra los ex oficiales generales que estuvieron en la administración anterior. «Nosotros tenemos dos partes donde rendimos: la Municipalidad y el Ministerio del Interior y las mismas facturas fueron emitidas a las mismas entidades, como lo estableció la investigación de la Junta Nacional contra don Enrique Valderrama, ex superintendente, y Jorge Nova, ex tesorero».
Precisamente Óscar Fonseca, uno de los querellados, es quien denunció los actuales problemas en la institución a la Gobernación Provincial de Concepción y el Ministerio de Justicia, y además acusó al actual superintendente de falsificar firmas para cobrar cheques.
«Según ellos yo habría robado (…) señor superintendente, no se olvide que las contabilidades del año 2015 están todas aprobadas, porque de lo contrario no habrían recibido la subvención de gobierno, por lo tanto, déjese de mentir», recalcó.
Por ley, se espera la decisión del gobernador provincial de Concepción, para proceder a la intervención.
El gobernador Robert Contreras precisó que «nosotros estamos a la espera de poder revisar todos los antecedentes, porque además existe una serie de situaciones que han sido denunciadas a la justicia ordinaria y ante eso también requerimos la información y vamos a solicitar una ampliación de los antecedentes para que se nos haga ingreso de los antecedentes respectivos y las decisiones que ha tomado el Poder Judicial en estas situaciones anómalas dentro del Cuerpo de Bomberos».
Fuente: www.cooperativa.cl