La Pampa.- Bomberos Voluntarios de General Pico llevaron a cabo este domingo por la tarde, el acto en conmemoración de los 22 años del incendio de PRODINCO que costó la vida a dos bomberos.
Se realizó el acto recordatorio por un nuevo aniversario del trágico accidente de PRODINCO, que cobró la vida de los bomberos voluntarios Javier Pérez y Manuel Olguín. Asistieron autoridades municipales, encabezadas por el secretario Coordinador Municipal, Edgardo Privitera; el secretario de Economía, Luis Anconetani; familiares de los fallecidos y el Cuerpo de Bomberos Voluntarios de la ciudad.
El homenaje se inició a las 14:30, con la colocación de ofrendas florales en el cementerio local. Más tarde las autoridades presentes se trasladaron hasta el monumento a los bomberos caídos, en calles 26 y 109, donde están escritos los nombres de Javier y Manuel.
Se realizó un emotivo minuto de silencio con toque de sirena, antes de que familiares, autoridades municipales y de Bomberos colocaron ofrendas florales en el monumento.
Las palabras de los familiares de los bomberos fallecidos en el siniestro, estuvieron a cargo del padre de Javier Pérez, quien recordó visiblemente emocionado: “Hace 22 años que escuchamos esta sirena, que nos viene acompañando y pensar que esta sirena fue la que trajo a nuestros hijos a la muerte. Es tremendo escuchar la sirena, cada vez que suena, pero gracias a Dios todavía nos acompaña todo el Cuerpo de Bomberos y de Cadetes, muchísimas gracias a todos ellos y a todos los que nos acompañan hoy”, finalizó.
El acto culminó con la canción de homenaje, compuesta con letra de Chango Ávalos y la música y la voz de Alejandro Avalos.
Para quienes no pudieron asistir en forma presencial, el acto fue transmitido a través de las redes sociales de Bomberos.
El hecho que llenó de dolor a la ciudad ocurrió en la tarde del 15 de agosto de 1999, un domingo, en un galpón de materiales almacenados por la empresa Tubos Prodinco. Dos bomberos -Javier Pérez y Manuel Olguín- perdieron la vida en el feroz combate contra las llamas, tras el derrumbe de una pared.
Hasta el día siguiente, bomberos, policías y voluntarios lucharon contra el fuego, el humo y los gases que se desprendieron del material depositado en la manzana comprendida por las calles 107, 26, 24 y 109.
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