Entre Ríos.- Un sueño anhelado, hoy comienza a cumplirse”, reza la placa colocada ayer por la mañana en las futuras instalaciones de la sede y el centro de capacitación y entrenamiento de la Federación Entrerriana de Asociaciones de Bomberos Voluntarios, que funcionará en Villa Elisa y llevará el nombre de José Aleu, cuyas hijas fueron convocadas a descubrir el bronce.
Se trata de un ambicioso proyecto iniciado en un predio municipal ubicado sobre Boulevard Schroeder, con dimensiones aproximadas de 100 por 100 metros, a 186 metros de Boulevard Illia y a 362 de Avenida Mitre, en la zona donde años atrás funcionaba una pista de karting. El convenio de comodato entre la municipalidad y la federación, previa autorización del Concejo Deliberante, fue firmado por un período de 50 años.+
“Esta será la casa de todos los bomberos voluntarios de Entre Ríos”, definió el presidente de la comisión directiva de Bomberos Voluntarios Villa Elisa, Luis Reymond, al dar la bienvenida al multitudinario acto que convocó a delegaciones de unos 30 cuarteles de diferentes puntos de la provincia y a importantes autoridades.
Más allá de dejar inaugurada la piedra fundamental de la sede y el centro de capacitación y entrenamiento de la federación, la ocasión sirvió para presentar en sociedad los avances del proyecto, con la estructura montada en medio del predio donde se desarrollarán cursos de formación para efectivos provenientes de todo Entre Ríos.
Sobre la obra
“Es un día de gran satisfacción y alegría por el nacimiento de este centro de capacitación y entrenamiento de la federación, próxima a cumplir 41 años de trayectoria, que nos toca en suerte a nosotros poder ser parte de este gran proyecto”, dijo Pedro Bisogni, actual presidente de la Federación Entrerriana de Asociaciones de Bomberos Voluntarios.
“Este proyecto tiene 2600 metros cubiertos, de los cuales llevamos 721 que pertenecen a la primera etapa. Hicimos una inversión importante y tenemos materiales comprados para terminar esta etapa, solo nos falta el dinero para la mano de obra”, informó. “Hemos hecho un pedido al gobernador, de quien espero pueda cumplir la palabra que me empeñó, de que estará acompañándonos. Después, dependerá de cada una de las asociaciones que puedan estar al día con la federación”, completó.
“La etapa de esta obra llevaría entre 4 y 5 meses, así que si Dios quiere y todos nos arremangamos un poco, tal vez para fin de marzo de 2020 podamos estar inaugurando la primera etapa de este gran proyecto junto con el ciclo lectivo”, anunció el dirigente durante su discurso.
Respecto a la segunda etapa, detalló que “incluirá 3 aulas, que serán 580 metros, más los pasillos de acceso a las mismas; las oficinas, más de 800 metros en la parte de los dormitorios para 100 personas y el comedor, de aproximadamente 800 metros, con capacidad para 150 personas”.
Agradeciendo a sus pares el acompañamiento, el presidente de la federación entrerriana se quebró de emoción durante el acto. “Hace un año estábamos firmando el convenio y no teníamos ni un peso, por eso teníamos tantas dudas sobre poder cumplir con el proyecto. Hoy podemos decir que llevamos invertidos más de 18 millones de pesos en materiales adquiridos, porque hasta las aberturas están compradas”, finalizó.
El legado de José Aleu
Nacido en 1920 en Santa Fe, llegó a Gualeguaychú a los 13 años de edad y, a finales de la década de 1960, un amigo lo designó secretario de actas del cuartel local, el primero en fundarse en Entre Ríos. Luego, fue socio fundador de la federación entrerriana y miembro del consejo nacional. Para referirse a su figura, se convocó a Carlos Ferlise, expresidente del Consejo Nacional de Bomberos Voluntarios y amigo.
“Podría hablar toda la mañana de José, pero recuerdo que era un dirigente distinto, sacrificado, humilde y especial de aquella época. Lo conocí en el año 1981 siendo yo un simple vocal suplente de la entonces federación argentina”, comenzó enunciando el orador respecto a quien será homenajeado llevando el nombre del lugar a inaugurar.
“Él viajaba a hacer gestiones y se pagaba de su bolsillo el boleto del micro, además de, en determinado momento, hacerse cargo de la luz y el gas del cuartel. Inclusive, recuerdo que llevaba la yerba porque no teníamos un solo peso y eran épocas muy difíciles”, relató como anécdota.
“Era un hombre tan bueno, humilde y respetuoso, que recuerdo me trataba de usted pese a ser yo bastante más chico en edad que él, que no tengo más palabras que estas: era un grande y creo que este es el mejor honor que se le puede hacer, por eso felicito a la federación entrerriana por haber elegido su nombre”, agregó Carlos Ferlise.
Fuente y foto: www.elentrerios.com