EL GALPÓN.- Los bomberos voluntarios del cuartel «17 de Octubre» de El Galpón lograron comprar su primera autobomba, lo que representa un gran avance para la institución y redundará en beneficio de esa comunidad y localidades y parajes vecinos del municipio.
Se trata de una unidad Mercedes Benz, con una capacidad de 2.500 litros, que fue comprada en Alemania con fondos nacionales y que llegará a esta localidad en los próximos días.
El grupo de voluntarios se formó luego del temblor ocurrido en 2015, que destruyó la localidad y en el que murió una vecina. Justamente se denomina «17 de Octubre», en referencia a la fecha en la que ocurrió el terrible movimiento sísmico.
La presidenta de la comisión directiva es la abogada María del Pilar Suárez, quien es una de las integrantes del cuerpo.
«Hemos recibido un subsidio de la Nación de $1.060.369,80. Con ese dinero compramos la autobomba, un grupo electrógeno, un equipo de trauma y de primeros auxilios, tablas rígidas, mangas, lanzas, acoples y una columna hidrante, entre otros elementos», dijo Suárez.
«La autobomba costó $743.966,93, más $210.000 del flete internacional, de Alemania a Argentina. Recibimos un subsidio de la Municipalidad de El Galpón de $100.000 con el que se paga al despachante de aduana y el flete interno, desde Buenos Aires», detalló.
El intendente Sacca viene colaborando en forma permanente con la institución, ya que, por ejemplo, en otra oportunidad otorgó un subsidio de $12.750 para los gastos de reparación de la camioneta. Además la comuna galponense otorga, desde febrero pasado, mensualmente a la institución, un susidio de $10.000 y aporta combustible y pasajes para el traslado del personal a capacitaciones y de la comisión directiva para realización de trámites administrativos.
«Queremos agradecer el apoyo y acompañamiento permanente de los cuarteles de Cafayate, Seclantás, Martín Albarracín de Salta y General Belgrano de General Gemes», remarcó Pilar Suárez.
En agosto del año pasado los bomberos voluntarios de El Galpón fueron noticia nacional porque juntaban agua en tachos, botellas descartables y baldes para acudir a sofocar incendios, principalmente de pastizales, muy riesgosos, que se siguen produciendo en estos días, a la vera de la ruta nacional 16 que atraviesa toda la jurisdicción de este a oeste.
La realidad de estos voluntarios está cambiando completamente, gracias al esfuerzo y el trabajo incansable de sus miembros y el apoyo de autoridades y de cuarteles de bomberos voluntarios de la provincia.
Fuente y foto: www.eltribuno.com
