Hace aproximadamente 5 años que este programa canino existe en la Capital del Eje y hace parte del grupo de búsqueda y localización de personas atrapadas, el cual funciona bajo la coordinación del oficial de bomberos Jaime Andrés Giraldo y tiene como objetivo fundamental el rescate de víctimas y salvar vidas.
Esta unidad bomberil alternativa se hace necesaria en una región de alta vulnerabilidad como ha sido catalogada la nuestra, además de ser avalada por La Dirección Nacional de Gestión del Riesgo y la Dirección Nacional de Bomberos de Colombia, quienes han asegurado que dentro de los grupos de componentes especializados de los grupos de rescate tanto intermedio como especializado debe haber soporte canino.
Mencionadas unidades perrunas no solo se utilizan para trabajar en estructuras colapsadas por terremotos sino también por explosiones o por deterioros de viviendas de mucho tiempo, aclarando que estos servidores de cuatro patas no se exponen a temperaturas que comprometan su vida, en caso de incendios son sus colegas los encargados de entrar en acción.
Max, Cloe y Megan, están activos las 24 horas del día, los 365 días del año y trabajan bajo la modalidad del juego y la motivación, para ellos la búsqueda es sinónimo de entretenimiento y bajo ningún motivo ésta se les puede convertir en una obligación.
Sus perreras están ubicadas en la sede principal de bomberos y existe un guía asignado por turno, en total son 7 personas guías las que trabajan en el componente canino, las cuales se encuentran certificadas y han participado en cursos a nivel nacional, en ciudades como Buga, en el Valle del Cauca y Neira Caldas.
No menos importantes son los perros, quienes han participado en movilizaciones a nivel nacional donde han sido bien evaluados por personal de la Dirección Nacional de Bomberos
Como cualquier otra celebridad, estos peluditos y héroes del rescate llevan una dieta a base de concentrado, su entrenamiento se realiza cada ocho días en diferentes terrenos lo que permite vigilar la resistencia y habilidad de cada una de las razas, gozan de todo el amor y mimos de su equipo de trabajo y de quienes eventualmente se acercan a la estación para saludarlos.
La particularidad de este equipo de canes pereiranos, radica en que han sido donados por sus dueños o protectores; Max de tres años fue entregado por sus amos, Megan de la misma edad proviene del cuerpo de Bomberos de Armenia – Quindío y la pequeña y joven Cloe que este próximo 25 de abril cumple sus dos primeros añitos también llego de la misma manera a integrar el hogar bomberil.
Jaime Andrés Giraldo, Coordinador de este equipo de salvamento, hace un llamado a los pereiranos para que adopten perros desprotegidos, también a que se acerquen a las instalaciones de bomberos y conozcan a las estrellas de esta historia y por último a respetar los animales, cuidar el medio ambiente y preservar la vida, porque en la Capital del Eje prevalece el respeto y el civismo hacia los animales.
fuente y foto: elpereirano.com