Buenos Aires.- Desde que participó a bordo de un camión autobomba en un desfile del 25 de mayo, Álvaro Lafarge supo cuál era su vocación. Este chico con síndrome de Down fue regularmente al cuartel de Junín para formarse. Sin embargo, las nuevas autoridades no lo dejan seguir haciendo lo que más le gusta.
«Viajó a La Plata, se hizo el preocupacional, pasamos por el Seclas (Servicio de Colocación Laboral Selectiva para Personas con Discapacidad) y fue aprobado por todo. El jefe de bomberos hizo una nota que él estaba cumpliendo una función que no corre riesgo su vida», describe Mariana Sánchez, mamá de Álvaro, que también lanzó una petición en la ONG Change.org
El nuevo jefe del cuartel le comunicó a la familia que no podía dejar entrar a Álvaro al cuartel hasta que sea nombrado oficialmente. El caso ya se encuentra registrado en la Dirección de Personal del Ministerio de Seguridad de la Provincia con el expediente 21100-8183/2014. Sólo resta la firma de Cristian Ritondo.
«Él no entiende de papeles, no entiende de firmas. Queremos que tenga una trabajo como todo el mundo. Un trabajo para que no sea una carga el día que no estemos», concluye emocionado su papá que trabaja como bombero para el Servicio Penitenciario Bonaerense (SPB)
fuente: tn.com.ar