Buenos Aires.- Los Bomberos Voluntarios de Hurlingham descansaban en una vivienda frente al cuartel cuando seis ladrones forzaron el portón y se llevaron la moto de uno de ellos. Horas después, la encontraron abandonada en una esquina cercana.
La madrugada del lunes 14 de octubre parecía tranquila para los Bomberos Voluntarios de Hurlingham, que descansaban en una vivienda particular ubicada frente al cuartel de Av. Roca y Amoroso. Aquel domicilio es propiedad de un integrante del plantel de Hurlingham y lo presta para que quienes están de guardia puedan descansar con mayores comodidades.
Pero a las 3.30 de la madrugada, esa aparente tranquilidad se vio interrumpida por la presencia de seis delincuentes que arribaron a la vivienda y forzaron la puerta del garaje. En pocos segundos, los delincuentes vieron una moto que se encontraba estacionada y se la llevaron.
No fue hasta la mañana siguiente que los Bomberos allí presentes notaron la falta y se la hicieron saber al dueño de la casa y de la moto.
En camino a hacer la denuncia, el hombre encontró su moto, abandonada en la intersección de Cañada de Gómez y Aconcagua.
Investiga la UFI 8 de Morón, que busca dar con los seis responsables del robo.