Jujuy.- Jujuy lleva más de un mes combatiendo los incendios forestales en las Yungas, que ya arrasaron alrededor de 20 mil hectáreas. Algunos focos se mantienen incontenibles y pese a los esfuerzos no se logra apaciguar el fuego.
En este contexto se conocieron internas que se están dando entre bomberos voluntarios y la provincia, por algunos desacuerdos en cuanto a formas de trabajo. La situación en particular se dio con los Bomberos Voluntarios de Monterrico. Gabriela Vilte, Presidenta de la institución, relató, «Hemos sufrido un atropello y discriminación siendo nosotros los iniciadores de la convocatoria para trabajar dentro del foco ígneo. Lamentablemente funcionarios de la provincia no saben coordinar los trabajos como corresponden y han sentido recelo de nuestro trabajo y nos han corrido».
Señaló que el personal se presentó a trabajar después de tres días de descanso junto a los demás brigadistas y «el Coordinador de emergencias, el comisario Guanuco, corrió a mi personal, con toda la prepotencia, la mala educación. Vi llorar a mis bomberas, porque eran mujeres», manifestó Gabriela Vilte. Consultada sobre los posibles motivos expresó que no hay explicación y lo que les preocupa es el gran daño al ambiente que se está produciendo en la zona. «La vida de todos nosotros está en peligro. Me hago la pregunta, si quieren apagar eso o no quieren, que sean sinceros». Vilte señaló que la lluvia no ha ayudado mucho y que tampoco hay pronóstico favorable para los próximos días por lo que es necesario diagramar otras estrategias porque lo que se ha hecho hasta ahora no ha sido efectivo. «Hay que probar otras formas de trabajo, otras técnicas», dijo.
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