Carlos Pallalef se transformó en héroe el domingo pasado al salvarle la vida a una beba de 13 días en Carmen de Patagones. Es bombero voluntario desde los 14 años, Instructor Nacional de RCP y trabaja en un hotel.
Para «Caio», así lo conocen en la localidad maragata, era un domingo habitual. Había terminado de dar un curso de RCP y mientras se preparaba el almuerzo, escuchó el llamado de auxilio de una vecina.
«Me acerco a la vivienda y veo que la beba de 13 días estaba totalmente morada en brazos de la mamá», describe Carlos Pallalef que con 24 años se especializa en emergentología.
Sin dudarlo aplicó sus conocimientos. «Me doy cuenta que tiene signos de atragantamiento, que es una situación normal en un lactante». Explica que «broncoaspira con su propia saliva, en este caso era un reflujo». En ese momento puso a la bebé boca abajo en su antebrazo y le dio golpes en la espalda, en medio de los omóplatos.
«En los primeros golpes sacó todo el reflujo, aunque se volvió a atragantar. Tuve que hacer varias veces el procedimiento, hasta que llegó la ambulancia y trasladada al hospital», explica Carlos.
Todo fue una situación muy compleja, pero Amparo tuvo suerte de contar con su héroe a pocos metros, ya que esa rápida intervención le permitió que llegara al hospital con vida, donde estuvo internada unos días y luego fue dada de alta.
Carlos siempre mantuvo la calma, es joven pero hace años que está relacionado con las emergencias. Es que a los 14 años ingresó como bombero voluntario, cuando un año antes había perdido a su papá por la Gripe A.
«Un día sonó la sirena y le dije a mi vieja que me vaya a anotar. El jefe (de los bomberos) tomó la decisión de que me quedara y el cuartel me cambió la vida. Me cuidaron como un hijo todos los compañeros», cuenta Pallalef.
A partir de ese momento, su vida giró entorno a las emergecias y se fue especializando hasta llegar a convertirse en Instructor Nacional de RCP. A su vez, también se gana la vida trabajando desde hace tres años en el hotel de Casa Crespo.
«En un momento también me tocó asistir al manager de Valeria Lynch cuando estaba trabajando como recepcionista. El hombre tuvo un principio de ACV», cuenta Carlos quien además invirtió en equipos importados que permite que los alumnos de los cursos puedan aprender a realizar las reanimaciones como si fuera en la vida real.
Su pasión sigue siendo las emergencias. Cuenta que desde chico observaba a su tío que era chófer de ambulancia y su gran corazón para ayudar a otros asumiendo el compromiso de ser bombero voluntario, quienes no cobran por esa actividad.
Carlos Pallalef brinda capacitaciones todos los fines de semana con equipos homologados y realiza concientización sobre el uso del desfibrilador automático. Capacita a muchas personas y tiene proyectos con respecto a situaciones de emergencia en Viedma y Patagones. Trabaja para concretar proyectos de simulacros y capacitaciones.
En medio de todas esas actividades, siempre está en alerta. Como sucedió con Amparo, donde todos esos conocimientos le permitieron salvarle la vida a la beba de 13 días.
Fuente y foto: www.rionegro.com.ar