Salta.- Ana Gareca vive en Aguas Blancas. La poliomelitis le quitó las posibilidades de caminar cuando tenía apenas 1 año. Desde ese día vive una realidad cotidiana que se transforma en odisea y a pesar de las murallas que se interpusieron ante ella, egreso del BSPA en Orán, trabajó como domestica y desde hace dos años ingresó al cuartel de Bomberos de Aguas Blancas. Es mamá soltera, tiene un niño de 4 años a quien manda a cursar el pre jardín y por quien da su vida.
Hoy cumple la función de «radio operador» y desde su ingreso al escuadrón vive ahí con su pequeño hijo.
Durante mucho tiempo Ana se cuestionaba y le costó entender porque debía vivir así y según su relato, internamente sufrió un proceso que la llevó a aceptar su condición y actualmente es feliz, porque no depende de nadie y ha ganado optimismo en su existencia. «Yo siento que soy como todos los demás, y hoy soy mama», declara emocionada.
Su historia de vida, ejemplo de tenacidad y esmero que inspira a muchos, fue contada por el senador provincial Pablo González quien gestionó, junto a otras autoridades del norte salteño, la donación de una silla de ruedas que le facilite a Ana un mejor vivir.
Fuente y foto: www.quepasasalta.com.ar