Cordoba.- En mitad del juicio que se sigue por el presunto amaño de unas oposición a bombero, un nuevo frente se abre dentro del parque de Córdoba. Un grupo de bomberos conductores de la capital ha presentado un recurso contencioso administrativo al Ayuntamiento. Se trata de los ocho trabajadores de la promoción que aprobó las oposiciones en 2011. Todos ellos reclaman que se les considere, como al resto de sus compañeros, bomberos. Los demandantes afirman que las pruebas que pasaron -tanto físicas como teóricas- les equiparan con el resto de sus compañeros para realizar las mismas tareas.
La promoción de 2011 es especial porque fue la primera en la que los 12 aspirantes que aprobaron lo hicieron con la categoría de bomberos conductores. Hasta entonces, quienes llevaban los vehículos del cuerpo de extinción de incendios eran considerados oficiales conductores y accedían a través de pruebas distintas.
De los 35 conductores que trabajan en los dos parques de la capital, solo los ocho de la promoción de 2011 que permanecen en Córdoba -dos se trasladaron a Toledo, uno a Alicante y otro a Málaga- tienen el título de bomberos. “Por eso pedimos que nos dejen trabajar como bomberos, porque lo somos. No solo somos conductores. Sabemos llevar los vehículos pero también actuar en las urgencias y emergencias”, se queja uno de los trabajadores firmantes de la demanda.
Ante la denuncia interpuesta en los juzgados, los demandantes han recibido la misma respuesta del Ayuntamiento que obtuvieron a sus reiteradas peticiones de cambio: el silencio. “No dicen nada, callada absoluta por respuesta. Y eso que conocen de sobra nuestra disconformidad con lo que está ocurriendo”, prosigue el bombero conductor. “Ante este silencio y esta inacción, no nos ha quedado más remedio que presentar la demanda”, termina.
“Esta discriminación”, reza el escrito, “alcanzó desde un inicio ámbitos muy diversos y todos ellos de capital trascendencia, tales como el paso de categoría, la disponibilidad de equipos de protección, trato desigual en el curso de ingreso, acceso a los cursos de formación, contenido de las prácticas diarias y simulacros, actividades diarias de revisión matinal, ocupación de tareas y puestos de trabajo concretos –quedando relegados de manera exclusiva a tareas de conducción-, cambios de guardias, días de vacaciones y asuntos propios”.
“La realidad cotidiana”, prosigue la demanda, “sigue siendo la misma, las discriminaciones continúan teniendo lugar y mis mandantes permanecen relegados a las tareas de conducción”. Equiparados a los conductores, ahonda el recurso,”se prolongan los agravios comparativos que existían desde el inicio, y lo que es peor y jurídicamente más trascendente (…) el Ayuntamiento permanece en una total falta de actuación al respecto, no llevando a cabo las tareas de control o dirección correspondientes, ni dictando instrucciones, ni órdenes ni acometiendo actuación alguna tendente a garantizar la concurrencia de todos los bomberos en igualdad de condiciones al desempeño de sus puestos de trabajo, formación, promoción, permutas y vacaciones”.
Fuente y foto: http://cordopolis.es