Un vergonzoso episodio ocurrió en la noche del viernes en la ciudad de San Lorenzo, cuando una autobomba del Cuerpo de Bomberos Zapadores no pudo salir del cuartel, porque automóviles particulares obstruían la salida de la sede policial, sobre calle Richieri.
La presencia de los bomberos había sido requerida en forma urgente en calle Tucumán al 600, donde se estaba produciendo un incendio en un local de venta de ropa femenina.
Según dio a conocer la Asociación Cooperadora del Cuerpo de Bomberos Zapadores de la UR XVII, “el móvil 932 quedo parado más de 15 minutos por no poder salir”, explicando que “gente comiendo en el restaurante de la UCI obstruyó la salida del móvil”.
Si bien en esta oportunidad el hecho tomó trascendencia, no es la primera vez que ocurre. A pesar de que en calle Richieri al 700, frente al portón de salida del cuartel de bomberos, está prohibido estacionar en ambas márgenes de la calzada y que, incluso, existe cartelería que lo indica, en numerosas oportunidades es común ver a vehículos estacionados infringiendo irresponsablemente esa prohibición, dificultando la tarea de los bomberos.
Autoridades de la Asociación Cooperadora, meses atrás, presentaron un pedido formal en el Concejo Municipal de San Lorenzo solicitando mayores controles del tránsito y la construcción de una dársena de estacionamiento para las autobombas, por la reciente instalación de un vertedero de agua junto al mencionado portón del cuartel, donde las autobombas cargan el vital elemento, tras lo cual se efectuó una reunión con los ediles.
Si bien en esa ocasión hubo acuerdo con los concejales, los reclamos elevados al Ejecutivo, aún no tuvieron repuesta.